viernes, 7 de diciembre de 2007

Atlantic City






Cuando vuelvas te encontrarás la luz del dormitorio encendida. Irás hasta la ventana y correrás la cortina, para que nadie vea sus calzoncillos tendidos en el suelo.


Cogerías inmediatamente un avión para Atlantic City y rondarías por los casinos, borracha y maloliente hasta las seis de la madrugada. Pero no lo harás y te quedarás allí de pie, fumando un cigarro. Luego te deslizarás en silencio bajo las sábanas y cogerás su mano dormida.

Atónita.


Nunca hay nada concluyente.


(foto: simplicissimus)

11 comentarios:

Para, creo que voy a vomitar dijo...

Atónita..., aunque ya debería estar acostumbrada. Uno, desafortunadamente, se acostumbra demasiado fácilmente a la rutina.

Yo creo que debería agarrar la mano de sus sueños, más que la de él.

Anónimo dijo...

No sé qué es peor, si la realidad o la salida que sueña con tener...

Me parece terriblemente triste que el único momento en que hay algo de amor sea cuando está inconciente, dormida.

:[

Pedro Chincoa dijo...

voltear el sueño hasta que aterrice en un lugar seguro, en el aire.

Srta. Effie dijo...

Dejaré mi mano accesible.

Por si acaso.

Toni dijo...

Un microrelato genial.

En ocasiones, nos da mas miedo salir de la rutina que la rutina en si. Solemos protegernos bajo una vida repetitiva que nos librará de futuros problemas... (o no)

El caso es que la vida solo la vamos a vivir una vez, y esto en ocasiones se nos olvida.

Nootka dijo...

Qué bonita canción, que me hace pensar en Sreck, que me hace creer en el amor, que me hace querer ser verde.

Yo creo que está bien que se haya quedado con la mano y no con la idea de irse a Atlantic City. Pero porque.. ¡vaya plan! ¿no? eso de rondar por los casinos borracha y maloliente. Pero si dices, por ejemplo, la mano o una vuelta al mundo visitando árboles milenarios pues ahí a lo mejor: Árboles 1 - Mano 0. O La mano o una beca en Guatemala para estudiar culturas precolombinas.

En fin, dejémoslo ahí.

Besos, pues.

Evinchi dijo...

A veces la rutina es poderosa y hace que tu vida no parezca suficiente, hasta que encuentras ese pequeño detalle que te hace recordar porque estás ahí.

besos.

Sintagma in Blue dijo...

...pero debería haberlo.

Besos

Gwynette dijo...

..me he deprimido !!!! o_O

Besitos

Anónimo dijo...

El alma de la poesía reside en el momento en que se queda de pie sin hacer lo que debería haber hecho. Con un cigarro en la mano como el que asume el paso del tiempo en una sala de espera, en la cola de una panadería, en el Inem... todo avanza con la rapidez con la que se consume ese cigarro.

RMS dijo...

Que contundente suena el : "Nunca hay nada concluyente". Momento de reflexión en mi.
Un placer leerte, en especial ahora, en este momento para mí.
Te doy las gracias y la música mágica.
Un abrazo.